Plan de Reconexión con La Naturaleza

Justificación

En estos días de confinamiento que hemos vivido debido a la pandemia del Covid-19, los niños se han convertido en seres invisibles.
Sin clases, actividades extraescolares, contacto físico con sus amigos y familiares ni juegos o ejercicio al aire libre.
Entre las consecuencias psicológicas que podemos ver ahora en los niños, los psicólogos hablan de varias concretas: irritación en su carácter, necesidad de mucha actividad y movimiento o, todo lo contrario, que estén aletargados. Pero no uno o dos días concretos, sino de manera constante o más permanente que antes.

Uso de dispositivos: con tanto tiempo en casa es probable que hayamos sucumbido a la televisión, la Tablet y el móvil más tiempo del debido.
No podemos asegurar que el confinamiento puede haber afectado a la salud mental de nuestros niños en el futuro ya que esta situación no se ha vivido con anterioridad, pero nos sentimos en la necesidad de compensar las necesidades de socialización y movimiento tan naturales en los niños que les ha sido negadas durante estos meses.
Inspirados por el hecho de que el aire libre reduce el riesgo de transmisión del virus, Playschool ha querido investigar las diferentes posibilidades de trabajo y educación al aire libre explotando al máximo nuestras instalaciones exteriores.

Para que los niños puedan pasar más tiempo fuera durante la jornada escolar tenemos que cambiar la visión del patio. No solo como lugar de recreo sino también como un lugar capaz de encender la curiosidad de los niños, un lugar en el que realizar aprendizajes, un lugar con distintos centros de interés.
Para ello se ha procedido a la modificación del patio, tratando de emular al máximo de nuestras posibilidades un entorno natural